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Qué necesito para solicitar la Ley de Segunda Oportunidad

Esta herramienta legal emerge como un salvavidas durante tiempos de apremio financiero, brindando la oportunidad de un nuevo inicio al permitir la reorganización de estas y, en el mejor de los escenarios, su cancelación completa.
Esta herramienta legal emerge como un salvavidas durante tiempos de apremio financiero, brindando la oportunidad de un nuevo inicio al permitir la reorganización de estas y, en el mejor de los escenarios, su cancelación completa.

La Ley de la Segunda Oportunidad es un valioso recurso legal que brinda a individuos y autónomos una vía para liberarse del abrumador peso del sobreendeudamiento.

El proceso para liquidar la deuda implica una serie de requisitos detallados y sigue un conjunto meticuloso de pasos que requieren la asistencia de un abogado especializado en el tema. Este procedimiento, con sus condiciones específicas, busca asegurar un enfoque justo y equitativo para todas las partes involucradas, proponiendo así una solución eficaz y legalmente sólida para el deudor.

Ser persona física

Una persona física se define legalmente como un individuo humano, en contraposición a una persona jurídica, que engloba entidades legales como empresas, asociaciones u organizaciones. Legalmente, una persona física es un ser humano con derechos y responsabilidades, con la capacidad de realizar actos jurídicos por sí mismo, tales como contraer obligaciones, firmar contratos y poseer bienes, entre otros.

Ser insolvente

La insolvencia es la incapacidad de una persona física o jurídica para cumplir con sus obligaciones de pago, ya sea porque sus ingresos no son adecuados para cubrir sus deudas o porque sus activos no son suficientes para afrontar las obligaciones financieras.

Deudor de buena fe

La legislación establece ciertos parámetros para determinar la buena fe del deudor. Aunque estos criterios pueden variar dependiendo de la jurisdicción particular, en líneas generales, se considera que este actúa de buena fe cuando ha realizado esfuerzos razonables para cumplir con sus compromisos financieros y pretende sinceramente resolver su situación de forma honesta y responsable. Algunas pautas:

  • Búsqueda de soluciones: El deudor ha procurado de manera diligente buscar acuerdos extrajudiciales con sus acreedores para saldar sus deudas o reorganizarlas conforme a sus verdaderas capacidades económicas.
  • Actitud colaborativa: Ha ayudado plenamente con los procesos legales necesarios, suministrando información precisa y detallada sobre sus finanzas y activos, y participando activamente en la reestructuración o negociación con los acreedores.
  • Comportamiento financiero prudente: Durante todo el procedimiento, el interesado ha evidenciado una gestión económica responsable, evitando prácticas fraudulentas, gastos innecesarios o malversación de activos.
  • Búsqueda de ingresos suplementarios: Se han emprendido esfuerzos razonables para incrementar los ingresos, explorar nuevas oportunidades laborales o fuentes de financiamiento, además de implementar medidas para reducir gastos superfluos.
  • Honestidad y claridad: Ha mantenido una conducta transparente y honesta en todas las fases del proceso, sin ocultar datos relevantes ni hacer afirmaciones falsas acerca de su situación financiera.

Estos criterios buscan diferenciar a aquellos que sinceramente buscan una solución de aquellos que intentan aprovechar el sistema de manera deshonesta o fraudulenta.

Colaborar con el juzgado

Cuando alguien busca beneficiarse de la Ley de la Segunda Oportunidad, es crucial cooperar tanto con el tribunal como con otros entes involucrados en el proceso. Esto puede manifestarse de diversas maneras:

  • Entrega de documentación: Resulta crucial suministrar toda la documentación necesaria de manera precisa y exhaustiva. Abarca información detallada sobre deudas, ingresos, activos, gastos y cualquier otro dato pertinente para evaluar la situación financiera.
  • Adherencia a plazos y requisitos: Respetar los plazos fijados por el tribunal para la entrega de documentación, la respuesta a requerimientos o la realización de pagos acordados es esencial.
  • Actualización de información precisa: Además, se debe mantener al tribunal al tanto de cualquier cambio significativo en la situación financiera o personal. Esto abarca modificaciones en ingresos, empleo, activos u otra información relevante.
  • Cooperación con administradores concursales o mediadores: En ocasiones, se designan administradores concursales o mediadores para ayudar en el proceso. Trabajar en conjunto con ellos, proporcionando datos requeridos y siguiendo sus consejos, puede acelerar el procedimiento y aumentar las posibilidades de éxito.

Además, hay otros requisitos para poder acogerse a esta ley: tener más de 1 acreedor, es decir como mínimo 2 acreedores; y no tener antecedentes penales por delito socioeconómico con condena superior a los 3 años.

Si se encuentra en una situación de sobreendeudamiento y cumple los requisitos que exige la ley ¡No espere más! Contacte con Lex & Tax para el estudio de viabilidad y empiece una vida sin deudas.